Los rincones de Zipaquirá que todos deberían visitar

Zipaquirá, conocida como la "Ciudad de la Sal", es un tesoro enclavado en el corazón de Cundinamarca. Más allá de su famosa Catedral de Sal, este municipio ofrece rincones llenos de historia, cultura y belleza natural que merecen ser descubiertos.
1. Catedral de Sal: Un santuario subterráneo único en el mundo
A 180 metros bajo tierra, la Catedral de Sal es una obra maestra de ingeniería y espiritualidad. Construida dentro de una mina de sal, sus túneles albergan un Viacrucis tallado en roca, una cruz de 16 metros iluminada desde abajo y esculturas que rinden homenaje a los mineros que la hicieron posible. En 2007, fue elegida como la Primera Maravilla de Colombia, destacando su valor cultural y religioso.
Un dato curioso: la antigua Catedral de Sal apareció en el reverso del billete de 500 pesos emitido en 1968, reflejando su importancia en la identidad nacional.
2. Centro Histórico y Plaza de los Comuneros: Testigos del tiempo
El corazón de Zipaquirá late en su centro histórico, donde la arquitectura colonial se mezcla con la vida cotidiana. La Plaza de los Comuneros, rodeada de edificaciones emblemáticas, es un lugar perfecto para pasear y disfrutar de la atmósfera local.
Aquí se encuentra la Catedral Diocesana de Zipaquirá, diseñada por Fray Domingo de Petrés. Su construcción comenzó en 1805 y culminó en 1916, siendo un ejemplo destacado del estilo neoclásico en Colombia.
3. Parque de la Esperanza: Naturaleza y tranquilidad
Para quienes buscan un respiro verde, el Parque de la Esperanza ofrece senderos rodeados de naturaleza, ideales para caminatas y momentos de reflexión. Es un espacio que invita a la conexión con el entorno y a disfrutar de la serenidad que ofrece Zipaquirá.
4. Museo Arqueológico de Zipaquirá: Un viaje al pasado
Este museo alberga una colección que narra la historia de la región, desde las culturas precolombinas hasta la época colonial. Es una parada obligatoria para quienes desean comprender la riqueza cultural y el legado histórico de Zipaquirá.
5. Estación del Tren Turístico de la Sabana: Un viaje al pasado sin moverse
En pleno corazón del municipio se encuentra la Estación del Tren Turístico de la Sabana, un ícono arquitectónico que parece detenido en el tiempo. Aunque no tomes el tren, vale la pena visitarla: su estructura de estilo colonial, su ambiente bohemio y la energía nostálgica que emana del lugar te invitan a imaginar las historias de viajeros de otras épocas.
Además, los fines de semana se llena de vida con presentaciones culturales, música y la alegría de los turistas que llegan y parten. Es un sitio ideal para tomarte una buena foto y sentir la magia del viaje… sin salir del andén.
Zipaquirá es más que su famosa catedral; es un mosaico de experiencias que cautivan a cada visitante. Desde sus calles empedradas hasta sus espacios naturales, cada rincón cuenta una historia que enriquece el alma y despierta la curiosidad. Una visita a esta ciudad es una invitación a descubrir la esencia de Colombia en su máxima expresión.